¿Tienes una marca ya definida y posicionada en Internet?
Si tuvieras que escribir tres razones por las que tus servicios son más valiosos que los del resto, ¿serías capaz de encontrarlas?
¿Tienes definidos los valores que promueven tu marca?
¿Sabes perfectamente dónde eres muy muy bueno/-a?
¿Tienes marcados los objetivos que quieres lograr con tu marca personal?
¿Conoces la historia con la que quieres impactar en tus pacientes, que hará que te recuerden?
¿Has creado ya algún elemento de identidad de marca: logo, tipografía, colores, web, blog, redes sociales…?
En tus redes ¿tienes una línea de comunicación marcada, que transmite tu personalidad, que te hace reconocible?
En tus redes ¿tienes marcada una línea de formato de publicaciones, cada una con un objetivo claro: captar atención, que dejen su email, buscar interacción…?
¿Has definido cuál es tu paciente ideal? Conoces el perfil al detalle: necesidades, comportamiento, edad, poder adquisitivo, localización…
¿Piensas que tu contenido cubre las necesidades de tu audiencia? Resuelve aquello que buscan, les das información clara.
¿Tienes una estrategia de contenido para tus redes para cada mes?
¿Revisas los resultados obtenidos en tus redes?
¿Inviertes en publicidad?
Si te encontraras en un ascensor con esa persona que puede catapultar tu carrera profesional ¿tendrías controlado ese mensaje de 30 segundos sobre ti, tu labor y tu valor como profesional?